Sfougato es un aperitivo ideal para una cena con invitados, que se puede, incluso se debe tener preparado con un dÃa de antelación. Es suave pero lleno de sabor, gracias al queso feta que le da una personalidad muy marcada.
Ingredientes para preparar sfougato
- CalabacÃn, 800 g [un par de calabacines medianos]
- Queso feta, 200 g
- Cebolla, una mediana
- Huevos, 4
- Aceite, 1 cucharada
- Eneldo
- Menta fresca
- Sal, pimienta
- Opcional: Bacon o pollo asado en tiras.
 Modus Operandi del sfougato
Antes de empezar, una advertencia para toda la receta: El queso feta es extraordinariamente salado, hay que usar la sal con muchÃsima precaución, especialmente si también añadimos bacon a la mezcla.
Lo primero es preparar el calabacÃn. Se lava bien, y se ralla con un rallador de agujeros gordos. Se deja en un escurridor durante un mÃnimo de 15 minutos, mejor 30, para que suelte el lÃquido. (Se puede pelar, esto es a gusto de cada uno. A mà me gusta el toque verde que aporta la piel).
Con el calabacÃn ya reposado, es momento de comenzar.
En una sartén se pone a calentar la cucharada de aceite. Mientras tanto, se pela la cebolla y se corta en daditos o en juliana, como más te guste. Se sala ligeramente, y se pocha a fuego medio-bajo hasta que esté blandita. Se añade el calabacÃn, otra pizca de sal, y se cocina todo junto unos 10 minutos.
En este momento, podemos añadir si nos gusta, unas tiras de bacon o de pollo que haya sobrado de otro plato, esto se hace habitualmente en Grecia, de donde es originario el plato.
Una vez esté cocinado todo, se vuelve a poner en el escurridor, y se deja otros 30 minutos para que suelte todo el lÃquido posible. En el momento de que el sfougato cuaje en el horno, el exceso de lÃquido no es una ayuda. Es un buen momento para precalentar el horno a 250º, aunque cuando se vaya a meter el sfougato habrá que bajarlo un poco.
Una vez está escurrido por segunda vez, se puede continuar.
En un bol se ponen los huevos, con otra pizca de sal (moderada), el eneldo, la menta y la pimienta molida.  Se bate todo, y se desmenuza el queso feta sobre la mezcla. Se añade la verdura escurrida, y se mezcla bien.
En una fuente para horno, previamente cubierta de papel vegetal (salvo que sea antiadherente y no lo necesite) se vuelca la mezcla y se mete al horno. Se cuece durante 30 minutos a 180º, y se deja gratinar 5 minutos más cuando haya terminado, para que se forme una costra crujiente y dorada.
Autor: Migas en la mesa