A veces nos empeñamos en comprar nuevos muebles cuando los que tenemos pueden convertirse en algo maravilloso solo con un poquito de tiempo para dedicarles. Es el caso de un mueble auxiliar de comedor que se quedó en la casa nueva que compramos. Estaba bastante mal, con las piezas desencoladas, las puertas desvencijadas, un agujero en la chapa trasera y un montón de rozaduras. Pero la estructura y la forma era bonita, y me pareció que se podrÃa recuperar un mueble y hacer de él un estupendo rincón para desayunos. ¡Os enseño el antes y el después y luego os cuento el proceso aunque en este caso no tengo fotitos que tuve un pequeño problema con la tarjeta de la cámara!
Asà es como ha quedado… (aún tengo que esconder el cablerÃo del rincón de la derecha)
Y esto era de lo que partÃamos… (no miréis mucho el desorden, que acabábamos de mudarnos y ponÃamos las cosas al tuntún hasta buscarles su hueco definitivo, jejeje).
Como véis la parte de abajo estaba desvecijada y eso hacÃa que las puertas encajaran mal. Además, estaba lleno de rozaduras y le habÃan hecho un agujero en la chapa trasera (detrás del microondas si os fijáis se ve la pared). Lo primero para restaurar un mueble, es quitarle todos los herrajes, y arreglar los posibles problemas de estructura. En mi caso lo tumbé y encolé la parte inferior, pero el paso del tiempo hacÃa que se hubiera vencido tanto que la cola solo no bastaba… Asà que para reforzarlo puse unos tornillos abajo para unir la tabla lateral a la estructura central.
En cuanto a las rozaduras, un poquito de masilla para madera para rellenar los huecos, y la posterior capa de imprimación y de pintura hacen que quede como nuevo. En mi caso, después de la imprimación le di primero una capita de gris clarito antes de aplicar el blanco, que pinté sin cubrir completamente la capa inferior, para hacer un efecto de mueble por el que ha pasado el tiempo al estilo shabby chic.
También aproveché a cambiarle el contrachapado de atrás. Si no está roto, igualmente puedes desmontarlo para colocar el papel decorativo que quieras que se vea de fondo, mejor después de pintarlo para evitar que pueda mancharse de pintura.
Ya solo queda volver a montar los herrajes (aprovecha a darles un poco de brillo y quitarles el polvo) y la chapa trasera ¡y el mueble está listo para seguir viviendo más años con un lavado de cara integral!
Hola!!! Me encanta como ha quedado el mueble. Muy chulo!!! No parece el mismo!!! Qué buenas ideas. Un saludo.