¡BIENVENIDOS A DIY SHOW BLOG!


En este Blog compartiremos un millon de ideas que os encantarán. Además nuestra comunidad de Bloggers nos contarán sus anécdotas más divertidas, trucos e ideas que nos vendrán genial para el día a día. :)

Entre pañales: lo que la maternidad enseña

En realidad yo tenía pensado escribir este post sobre otro tema, pero el otro día tuve una charla muy interesante con una íntima amiga que me hizo cambiar de idea. Ambas hemos sido madres en los últimos 2 años y ella me contaba cómo estaba lidiando con algunos miedos. Estaba descubriendo que al ser madre se tenía que enfrentar a sí misma, con sus puntos fuertes y áreas de mejora. Escuchándola me di cuenta del baño de realidad que me dio la maternidad, así que me gustaría compartir mi experiencia con vosotros.

Hace 1 año y 6 meses que tuve mellizas. Una fantástica locura!! Durante el embarazo todo iba fenomenal hasta que una de ellas empezó a coger muy poco peso. A partir de ahí empezaron a controlarme, tenía que hacer más reposo y comer mejor. Pero, el 6 de Enero, 1 mes y medio antes de lo que les tocaba, me puse de parto. Ingresé y conseguimos aguantar 24h, pero finalmente nacieron el 7 de enero a las 13:11 y 13:13. De regalo de reyes!

Nacieron prematuras y se fueron directas a la incubadora, Candela con 1,200kg y Laura con 2,200kg. Madre mía,di a luz y no pude verlas hasta el día siguiente en la sala de neonatos, no podía cogerlas y los médicos me explicaban que estaban bien pero que tendrían que estar allí un tiempo, sobre todo Candela que era especialmente pequeña. Recuerdo que les oía como si fuera un sueño y miraba las incubadoras como si en cualquier momento fueran a salir de ahí. Fue en ese momento cuando sentí como todos mis miedos y lastres salían del armario, me miraban fijamente y me decían; ¿qué vas a hacer ahora con nosotros?

En concreto sentí como tendría que lidiar con 3 aspectos de mi personalidad, que una vez más la vida me ponía en frente:

  • La PACIENCIA:en ese momento las circunstancias me exigían tener paciencia cuando yo me considero una persona especialmente impaciente. Así que el día que me dieron el alta y me fui a casa sin las niñas pensé; ¿cómo voy a conseguir llevar esto? ¡A mí que me cuesta tanto esperar!Pues no me quedaba otra que abrirme a la incertidumbre. Convivir con ella, utilizándola para mantenerme alerta pero no para bloquearme. Porque normalmente con la impaciencia he provocado lo contrario a la velocidad. Cuanto más de prisa he querido ir más he ralentizado las cosas e incluso, a veces, consiguiendo el resultado opuesto. Aunque nos cueste verlo la incertidumbre nos ayuda a aprender y a crecer. Por eso tuve que aprender a seguir el ritmo que ellas me marcaban, no el mío propio. Porque por mucho que hubiera querido acelerar todo, no estaba en mi mano…no dependía de mí. Lo único que dependía de mí era tener paciencia para poder disfrutar y aprovechar cada momento con ellas. Y, por último, aprendí a enfocarme en lo que HABÍA en ese momento en vez de en lo que FALTABA. Como dijo Newton:

    “Si he hecho descubrimientos es más por tener paciencia que por cualquier otro talento”.

  • PREOCUPARME VS OCUPARME: esto sí que fue difícil para mí. Con los temas médicos tiendo a la pre-ocupación, es decir a ocuparme antes de tiempo, antes de que las cosas hayan pasado, antes ni siquiera de saber si pasarán. Y ahí estábamos, con las mellizas en manos de los médicos, 2 visitas diarias e intentando no adelantarme a todo lo que podía pasar. Intentando no ponerme constantemente en todos los posibles escenarios futuros donde, por supuesto, algunos de ellos podían no ser buenos. Pues, gracias a ellas, conseguí dejar de lado mi continua “pre-ocupación” para empezar a “ocuparme” día a día con lo que teníamos. En este sentido ayuda mucho fijarse micro-objetivos y no pensar a largo plazo. Si cada día que iba a la incubadora hubiera pensado en cuándo nos íbamos a ir, se me habría hecho cuesta arriba porque ves la meta muy lejos. Así que decidí pensar en qué pasaría mañana, cuánto habría engordado Candela, cómo comería Laura y antes de darme cuenta Laura ya estaba fuera y 20 días más tarde Candela.
  • La VULNERABILIDAD: la maternidad es una de las cosas que más te pone de manifiesto tú vulnerabilidad. Te enseña que no sabes y que, por mucho que leas o te cuenten, sólo tú puedes ir aprendiendo paso a paso. La primera vez que sacaron a Candela de la incubadora y me dijeron que le diera de comer, pensé que no sería capaz. Parecía tan frágil que me asustaba hacerlo mal. En ese momento sientes la contradicción de ver a alguien depende de ti pero que, a la vez, todo es nuevo y no sabes cómo hacerlo. Así que hay que asumir que te equivocarás, muchas veces, pero que no pasa nada y es la única forma de aprender cosas nuevas. A partir de ese momento, te das cuenta de que los hijos te harán sentir vulnerable constantemente, pero esa es la magia. Todas las personas somos vulnerables en algunas áreas pero no hay que verlo como una debilidad, sino cómo algo que nos hace más fuertes.

Había trabajado estas 3 áreas mientras me formaba como coach, ya que son distinciones muy habituales en coaching. Y supongo que serán áreas que tenga que seguir trabajándome toda mi vida, pero hoy soy mucho más consciente y tengo más herramientas.

También he de contar que ellas y mi pareja me lo pusieron muy fácil. Transmitían tanta fuerza que era imposible que no te la contagiaran.

Gracias Laura y Candela por enseñarme tanto y por lo que me queda por aprender.

Y gracias Pablo, mi coach día a día.

One thought on “Entre pañales: lo que la maternidad enseña

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>


ARCHIVOS